Inteligencia, integridad en la lucha contra el trabajo forzoso en los productos de mar

James Wright

Steve Trent, co-fundador de Fundación para la Justicia del Medio Ambiente, incansablemente combate la trata de personas, la esclavitud y la pesca INDNR

Nota del editor: Esta es la primera de una serie de tres partes (una cada semana) sobre el avance de las soluciones de los derechos humanos en la cadena de suministro mundial de productos de mar antes de la Cumbre SeaWeb de Productos de Mar, durante Feb. 1-3 en St. Julians, Malta. El Advocate estará reportando desde el evento, y su Gerente Editorial James Wright estará moderando una sesión de trabajo titulada “Midiendo la participación de los consumidores y las percepciones de los productos de mar sostenibles.”

***

La breve película que Steve Trent presento en la Cumbre SeaWeb de Productos de Mar el año pasado en Nueva Orleans fue a la vez inquietante y poderosa. La servidumbre por deudas, la intimidación, la violencia y el asesinato en los buques pesqueros tailandeses – cuentos de tortura contados por los trabajadores migrantes indocumentados forzados a soportar condiciones inhumanas en el mar, a menudo durante largos períodos de tiempo.

Los abusos que la Environmental Justice Foundation (EJF, la organización que Trent co-fundó) puso al descubierto después de una larga investigación se hicieron públicos meses antes en un artículo publicado por The Guardian. El video dio a los asistentes a la Cumbre un contexto perdurable, emocional al escándalo que ha involucrado desde entonces a algunos de los principales proveedores de productos de mar y a sus clientes. Los delitos expuestos en Tailandia – y que Trent sostiene persisten hasta nuestros días – eran los peores que él ha visto en un cuarto de siglo de trabajo en materia de derechos humanos y la defensa del medio ambiente.

“Siempre tratamos de abstenemos de hipérbole y de dar declaraciones retóricas grandes en estas cosas. Pero nunca había visto algo así,” dijo Trent al Advocate. “Eso incluye investigaciones de campo en Uzbekistán y Bangladesh y otros lugares. Es realmente sorprendente lo profundo y lejos que fue.”

Steve Trent, co-founder of Environmental Justice Foundation. Photo courtesy of EJF.
Steve Trent, co-fundador de la Fundación para la Justicia del Medio Ambiente. Foto cortesía de EJF.

Para Trent, co-fundador de la Fundación para la Justicia del Medio Ambiente, enfrentar el abuso es un trabajo desafiante que no termina una vez que las cámaras han captado las imágenes y los informes de periódicos son difundidos al público. Quizás los aspectos más difíciles de documentar y denunciar los abusos en la cadena de suministro de productos de mar es la  navegación de la “mentalidad de búnker” que se manifiesta entre los acusados.

“El gobierno tailandés ha hecho progresos alentadores, e incluso ha hecho algunos arrestos, en el tiempo desde que los informes salieron. Ha implementado un nuevo marco legal … no es cercanamente suficiente,” dijo Trent.

“El hecho del asunto es que todavía no están participando en un ejercicio unido significativo a nivel nacional para la erradicación de los abusos de derechos humanos,” agregó. ” Puedo garantizarte que – Yo apostaría mi trabajo, mi casa y mi reputación en este hecho – que la industria tailandesa de productos de mar todavía tiene un extenso abuso de trabajo forzado, traficado, de esclavitud o servidumbre en ella. Ellos desearían que yo estuviera diciendo otra cosa.”

Trent “tirara sin tapujos” de nuevo en la Cumbre de este año, que tiene lugar en St. Julians, Malta, durante Feb 1-3, un foro en el que él tendrá múltiples oportunidades de compartir información sobre los derechos humanos y desafiar a las autoridades, en persona, para lograr progreso. Él va a hablar con el ministro del trabajo de Tailandia, y también compartirá el escenario con el Comisionado del Medio Ambiente, Asuntos Marítimos y Pesquerías de la UE, Karmenu Vella, así como el ministro de Pesca de Ghana, una nación que ha sido cardeada por la pesca ilegal, no reportada y no reglamentada (INDNR).

“Realmente quiero demostrar que el proceso que se está llevando a cabo en Europa con el reglamento INDNR no es un ejercicio de confrontación sencilla de señalar con el dedo. Es mucho más que eso. Si la gente lo adopta y lo toma y en el extranjero se convierte en un esfuerzo de colaboración para eliminar a los malos jugadores, recompensar a los buenos, y ojala tener éxito en la generación de las pesquerías sostenibles a escala global.”

SeaWeb nombro a EJF como un “Campeón de Productos de Mar” el año pasado por sus esfuerzos en curso. Antes del evento en Malta, Trent estará continuando las investigaciones en el mar de la organización sobre la pesca INDNR y los abusos laborales, esta vez en el África occidental.

Puedo garantizarte que – Yo apostaría mi trabajo, mi casa y mi reputación en este hecho – que la industria tailandesa de productos de mar todavía tiene un extenso abuso de trabajo forzado, traficado, de esclavitud o servidumbre en ella. Ellos desearían que yo estuviera diciendo otra cosa.

EJF se fundó “explícitamente” para vincular la seguridad ambiental con los derechos humanos, de acuerdo con Trent. Las investigaciones de EJF descubrieron el trabajo forzoso y la trata de personas, así como extensos casos de pesca INDNR en las llamadas pesquerías “basura,” incluidas aquellas que suministran a los fabricantes de harina de pescado, cuyo mercado principal son los camaroneros. Más recientemente, un informe de Associated Press descubrió extensos abusos en los cobertizos temporales de pelado de camarones, o instalaciones de procesamiento subcontratadas donde la supervisión es a menudo insuficiente, si no inexistente. El mes pasado, la Global Aquaculture Alliance prohibió a cualquier planta de procesamiento certificada por Mejores Practicas Acuícolas (BAP) la externalización de sus operaciones de procesamiento a entidades de terceros.

La vinculación de los abusos laborales con puntos múltiples a lo largo de la cadena de suministro mundial de productos de mar ha sido un proceso doloroso, pero uno que ha creado mucho compromiso positivo, dijo Trent.

No hay ninguna vía única para cualquier empresa o agencia de gobierno, agregó, para responder a las acusaciones de abuso, ya este directamente implicada o no. Algunas empresas, grandes y pequeñas, han admitido en privado a Trent que sabían que los abusos habían estado ocurriendo, pero no actuaron hasta las revelaciones de los medios. “Uno de los puntos clave que he estado haciéndoles en repetidas ocasiones a los minoristas, es que tienen una ventaja no competitiva para combinar y aprovechar sus activos combinados – sus dólares y libras y euros – y decirle al gobierno tailandés públicamente y en conjunto, “no podemos aceptar por más tiempo el fracaso en Tailandia para aplicar y hacer cumplir nuestras propias leyes. Si Uds. quieren nuestro negocio continuado tienen que hacer esto.'”

Trent dijo que no está seguro de si los abusos laborales pueden ser totalmente erradicados de la cadena de suministro, pero que trabajar hacia ese resultado debe ser tarea de todos. “La gente siempre quiere tener una visión reduccionista de esto, con una sola línea sencilla,” dijo. “Pero muy a menudo no es un simple caso de que esto es correcto y aquello está equivocado; eso simplemente no se aplica. Creo que uno se acerca el tema con inteligencia e integridad, en primer lugar. Y si haces eso, y reconociendo como ciertamente lo hacemos de que es equivocado hacer a lo perfecto el enemigo de lo bueno, creo que es posible. Puede ser duro, pero es posible, para la mayoría de los actores del sector el lograr algo que es por lo menos bueno. Uno tiene que tener ese enfoque primero.”

@GAA_Advocate

Now that you've reached the end of the article ...

… please consider supporting GSA’s mission to advance responsible seafood practices through education, advocacy and third-party assurances. The Advocate aims to document the evolution of responsible seafood practices and share the expansive knowledge of our vast network of contributors.

By becoming a Global Seafood Alliance member, you’re ensuring that all of the pre-competitive work we do through member benefits, resources and events can continue. Individual membership costs just $50 a year.

Not a GSA member? Join us.

Support GSA and Become a Member